James Hollis

"Creo que somos conscientes de que el mundo se nos ha escapado de las manos, como si alguna vez estuviera en nuestras manos. Estamos cerca del proceso de individuación cuando somos bebés porque estamos gobernados por el instinto. El instinto nos dice qué es lo correcto para el organismo, sea cual sea. Pero como todos sabemos, somos pequeños, vulnerables y dependientes de nuestro entorno. Empezamos a hacer adaptaciones e interpretaciones. Nos preguntamos: ¿El otro es confiable o no? ¿Es el otro algo a lo que puedo acercarme o necesito mantener la distancia? Aprendimos estrategias básicas de adaptación y supervivencia en nuestros primeros días. Cuanto mayores sean las adaptaciones, potencialmente mayor será la separación que uno experimente del propio núcleo. Por eso existe el mundo de la psicopatología. Cuando uso la palabra “psicopatología”, no es de ninguna manera un juicio. Es una descripción de nuestras perturbaciones y relaciones interrumpidas con nuestra propia vida instintiva y anímica. Todo el proyecto de la vida es hasta qué punto puedes servir a lo que desea expresarse en el mundo a través de ti, lo que puede o no tener algo que ver con tu ego, puede tener o no algo que ver con hacerte rico o exitoso. por estándares sociales. Pero hay algo en ti que es imperioso, exigente, que expresa deseos y se trata de convertirte en quien eres. Por eso estamos aquí en primer lugar. Cada uno de nosotros es una pequeña pieza en un gran mosaico. Puede que a veces nos sintamos insignificantes, pero si quitamos esas fichas, ¿qué es el mosaico? Está privado. Individuación es una palabra para el proceso de desarrollo natural que está genéticamente integrado en nosotros, la lucha por recuperar una relación con él y servir a eso en lugar de servir cualesquiera que sean las demandas ambientales en un momento dado."

James Hollis



"El sentido del yo es bastante diferente al Yo. Cuando los junguianos hablan del yo, lo hacen con S mayúscula, por así decirlo. Es esa agenda organizadora de desarrollo la que está integrada en nuestra naturaleza; nuestro sentido de identidad es nuestra comprensión consciente de eso. Por supuesto, nuestro sentido de identidad puede depender en gran medida de lo que sucede a nuestro alrededor. Si nos preguntamos, ¿por qué un niño debería verse marcado o influenciado por, digamos, la pobreza, las enfermedades, el alcoholismo, el racismo o lo que sea porque está fuera de ellos? Por supuesto, cada niño lee el mundo para intentar ver cuál es su mensaje. ¿Qué piensas acerca de mí? ¿Quién soy yo en relación contigo? ¿Cómo debo comportarme? ¿Qué es seguro y qué no es seguro? Etcétera. Una vez más, existe un conflicto inherente entre la socialización y el crecimiento y desarrollo naturales. Ahora bien, obviamente es necesaria cierta socialización. Gran parte de esa socialización es productiva y útil. Aprendemos a detenernos en las señales de alto, aprendemos a mirar a ambos lados antes de cruzar la calle, aprendemos a usar el cuchillo y el tenedor. Estas no son imposiciones sobre uno mismo que intenta autocontrolarse, por así decirlo. Pero cuando se trata de encajar, ser adaptable, sentir permiso para ser quien eres, desear lo que deseas, emprender los proyectos que te interesan, esa es una cuestión completamente diferente. La mayoría de nosotros tenemos un sentido de nosotros mismos muy condicional. Puedo hacer esto o aquello, si tal o cual es cierto. O si soy una buena persona, estas cosas están disponibles para mí y otras no, y así sucesivamente. Sin embargo, siempre hay un profundo anhelo en la psique por la autoexpresión. No es desde un punto de vista consciente ni siquiera desde el punto de vista del ego, se trata más bien de qué es lo que desea expresarse a través de mí. Los neurobiólogos tienen mucho que enseñarnos, pero lo que falta en sus consideraciones es que estamos buscando significado, creando animales, sufrimos terriblemente cuando estamos desconectados del significado. Como dijo una vez Jung, las cosas más pequeñas con significado siempre son más grandes que las cosas más grandes sin significado. Por lo tanto, experimentamos la desconexión del significado. Algo dentro de nosotros está en grave peligro. Ahí es donde estamos la mayoría de los seres humanos, porque somos criaturas de adaptación, así es como sobrevivimos, así es como nos las arreglamos en este planeta. Al mismo tiempo, como sugerí antes, cuanto mayor es la adaptación, mayor es potencialmente la desconexión desde dentro. Entonces eso surge como una protesta de la psique, por sintomatología y pérdida de conexión, pérdida de significado o depresión, cualquiera que sea la forma que adopte. Es eso lo que tendemos a tratar en lugar del problema subyacente: ¿tiene esta persona una sensación de permiso para vivir su viaje? Descubrí que la mayoría de las personas no sienten un sentido profundo de permiso en la vida, porque aprendimos temprano que la vida es condicional y que hay que cumplir las condiciones para ser aceptable. Incluso el amor se convierte, por así decirlo, en una prueba. Mis padres me amarán si hago X e Y, no si hago otra cosa. Eso se traslada a la vida adulta.La recuperación del permiso y la recuperación de la autoridad personal, es decir, de las multitudes de deseos y presiones sobre nosotros en un momento dado, ¿qué voces vienen de lo más profundo, cuáles son verdaderas para mí? ¿Puedo encontrar el coraje para vivirlos en este mundo? Ahí es donde nos encontramos a diario.

Es por eso que mencioné la cita de Jung que mencioné antes: "Sólo la audacia puede librarnos del miedo". Si no se corre el riesgo, se viola el sentido de la vida. Hubo un momento en el que, de alguna manera, entró el destino y dijo: “Te vamos a poner en una nueva situación. Será una pérdida obvia”. Nótese las corporaciones, relacionadas con el corpus, el cuerpo. Es como si, mientras estuviera conectado al cuerpo, estuviera nutrido y seguro. Estoy separada, lo cual es el nacimiento, después de todo, ahora estoy allí sola. Sin embargo, la naturaleza nos ha equipado con los mismos recursos y energías que han estado allí desde siempre. Otra forma de decirlo es ¿por qué debería pensar que la fuerza y ​​la resiliencia que permitieron a mis antepasados ​​sobrevivir en este planeta no estarían presentes dentro de mí también? La diferencia es que hoy tengo información disponible para mí que ellos no tenían ni podrían haber imaginado. En segundo lugar, tengo un entorno cultural en el que hay muchas más oportunidades para la expresión del yo que las sociedades cerradas y la mayor parte de la humanidad ha experimentado hasta ahora."

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"En primer lugar, nosotros como animales compartimos con otras especies, tribus biológicas, también tenemos necesidades sociales o necesitamos tener una relación con los demás, sentido tribal. Pero en tercer lugar, esta cuestión indefinible del significado, o la vida del espíritu. Cuando te encuentras contigo mismo, sentirás una conexión con algo que es trascendente a la conciencia del ego. Sentirás el apoyo de eso de una manera muy práctica. Permítanme sugerirlo de esta manera: tenemos toneladas de evidencia todos los días sobre cómo conducir nuestra vida, sin embargo, a menudo llevamos vidas confusas e incapacitantes. En primer lugar está la función de sentimiento. Todos sabemos sobre eso. Pero no nos damos cuenta de que no eliges tus sentimientos. Los sentimientos son análisis cualitativos autónomos de su vida tal como la experimenta la psique. Puedes ignorar tus sentimientos, puedes anestesiarlos, puedes proyectarlos en los demás, puedes hacer muchas cosas, serás poseído por ellos. Pero los sentimientos te lo dicen. Digamos que estás en esta carrera para la que tu educación y tu trabajo te han preparado. Un día te das cuenta de que estás profundamente aburrido. Pero no puedes darte el lujo de permitirte ese sentimiento porque tienes un ingreso, tienes una familia que mantener, tienes lo que sea. Pero como verás en el fondo, tu psique ya ha registrado su voto sobre cómo estás pasando tu vida. En segundo lugar, tenemos sistemas energéticos. Cuando haces lo correcto para ti, la energía del yo te sostiene, podemos movilizar energía al servicio de las necesidades de supervivencia y adaptación. Eso es bueno, así podemos levantarnos a las tres de la mañana y cambiarle el pañal al bebé, eso es fundamental. Pero si continúas desarrollando tu energía a lo largo del tiempo en los lugares equivocados, esto conducirá inevitablemente al agotamiento, el agotamiento, la depresión, la automedicación, etc. En tercer lugar, tenemos sueños, los sueños también son análisis cualitativos autónomos de nuestra vida, tal como los observa el Yo, S mayúscula. Se enfrentan al ego de forma regular. Hace poco aprendí que si vives hasta los 80 años, sorprendentemente, seis de cada 80 años de tu vida los pasarás soñando. Piensa en eso. No durmiendo, sino soñando. La naturaleza no desperdicia energía, cumple un propósito. Uno de los propósitos de soñar es metabolizar la masa de estímulos que se nos ocurren en cada período de 24 horas. Es más de lo que podemos manejar, pero tiene que continuar procesándolo. Pero en segundo lugar, si prestas atención a tus sueños con el tiempo, te das cuenta de que hay algo de inteligencia allí, fuera de la esfera del ego. Puede tomar prestado y robar imágenes contemporáneas, la cultura contemporánea, pero es autónomo, no creas tus sueños, ellos vienen a ti. Intenta soñar con hamburguesas o algo así esta noche. Tu psique no te prestará atención. Asistirá a su agenda. La única pregunta es: ¿estás prestando atención? En cuarto lugar, con el tiempo, la cuestión del significado es que, si lo que estás haciendo es significativo, la energía estará ahí, la función de sentimiento lo respaldará. Por eso llevo 50 o 60 años enseñando. Ahora hay mucha enseñanza, pero la psique ha seguido apoyándola a través de los años, el día que no sea así, empezaré a hacer otra cosa. Por último, la psicopatología, cuando nos desviamos,la psique aparecerá y llamará a nuestra puerta. Si lo ignoramos, sonará más estridentemente hasta que nos veamos obligados a abordarlo. Fui bendecido, como ahora digo y no hubiera dicho en mi época de mediana edad, al haber logrado todo lo que quería lograr con esa comprensión de las cosas. Tuve una importante depresión vital. Me envió a mi primera hora de terapia. No era como si estuviera comenzando la segunda mitad de mi vida y fuera a hacer cambios importantes en mi vida. Fue con una sensación de inutilidad, hice todo lo que pensé que debía hacer. ¿Por qué no funciona? ¿Por qué no se siente bien por dentro? Ésa era una pregunta saludable. No lo entendí en ese momento, en ese momento simplemente quería deshacerme de la depresión como cualquier otra persona querría. Es por eso que podríamos gravitar hacia los medicamentos, o cinco sencillos pasos para esto o aquello. La verdadera pregunta que debe hacerse en ese momento es: ¿por qué su psique ha retirado de manera autónoma su aprobación y apoyo a la agenda que su conciencia del ego está tratando de implementar en el mundo? Ésa es la verdadera pregunta. Si continuamos preguntándonos eso de manera honesta, exhaustiva y disciplinada, comenzarás a encontrar algunas respuestas que volverán a ti."

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"En primer lugar, todo el mundo tiene algunos puntos estancados en su vida. Si le pides a una persona que te diga dónde siente que está estancada. Si piensan en ello más allá de la primera o segunda oración, se les ocurrirá un ejemplo. Si podemos identificar tan fácilmente dónde estamos estancados, ¿por qué no podemos despegarnos? La respuesta es que, en el momento en que empezamos a movernos en la dirección de despegarnos, activamos un campo arcaico de ansiedad que está dentro de nosotros. Hay dos amenazas categóricas a nuestra supervivencia y bienestar. Abrumados por el mundo que todos tuvimos cuando éramos niños, era un hecho, el mundo es grande y tú no, el mundo es poderoso y tú no, así que será mejor que encuentres una manera de lidiar con los poderes de ese mundo. Evitarlo y cumplirlo son las estrategias habituales. En segundo lugar, el abandono. Sin los demás, nosotros también pereceríamos. Hay un terror tremendo a estar aislado y solo. Ahora, si uno puede profundizar allí y decir: "Para despegarme, tendría que hacer X, Y o Z". Digamos, dieta. Una persona quiere perder peso. Utilizan la comida como forma de automedicación. Es muy común, porque los alimentos producen cambios químicos en nosotros. Puede ser la estrategia de esa persona para lidiar con su vida emocional. Si dejo ir eso, ¿qué habrá allí para mí? Entonces experimento el abandono, no hay nadie que me consuele, tendré que afrontar la magnitud de las tareas que tengo por delante sin mi automedicación y sin mi zona de retiro. Puedes ver por qué resulta preferible quedarse estancado. Porque entonces la pregunta es ¿qué tendré que asumir para despegarme? Muchas veces lo que tenemos que asumir es algo muy abierto y obvio. Podemos manejarlo, porque el cableado que sale de ese arcaico campo de ansiedad se generó esencialmente en nuestra infancia, surge y tiene la capacidad de apagar el ego. Pero también hay una persona que ha aparecido en mi vida y que puede manejar esto. En primer lugar, muchas de las cuestiones que temo, por ejemplo, una persona podría decir: “Si abro la boca, perderé el amor y el apoyo del otro. Estaré allí solo, estaré solo”. Tal vez eso suceda, tal vez no, lo más probable es que no suceda. Pero si sucedió, tal vez ese sea el precio de emprender su propio viaje. Hay un adulto en escena, ese eres tú, que tiene la resiliencia, la variedad de opciones y la profunda experiencia para afrontar eso de una manera que un niño no puede. Los lugares estancados son buenos lugares para empezar a explorar el inconsciente, el primer paso. En segundo lugar, decir: “¿Qué se necesitaría para despegarse? ¿Qué ansiedad? Porque si puedo decir que estoy estancado, ya he hecho una declaración crítica al respecto, no quiero presentarme como una persona muy estancada. Más bien, estos son los lugares donde las viejas ansiedades se salen con la suya conmigo, porque todavía soy un sirviente de la ansiedad que generan. Si puedo asumir eso, entonces volveré a emprender mi viaje humano más amplio."

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"Es doloroso tomarlo, pero es más doloroso no hacerlo, necesitas saberlo. Si crees que la vida es difícil ahora, imagina tu vida al final cuando dices: “En realidad no estuve aquí. No hice lo que se quería hacer a través de mí”. Sospecho que no quieres estar en esa posición."

James Hollis



"Jung dijo que traemos la capacidad de conciencia. Contó una maravillosa historia sobre una expedición a África. En ese momento estaba en Uganda o en Kenia. Una mañana se levantó antes de su fiesta, salió y se paró al amanecer. Dijo: “Sentí como si hubiera entrado en una nueva relación tiempo-espacio. Sentí que estaba en primer lugar, en un ámbito edénico”. Habla de estas grandes manadas de animales que pasan a la deriva sin tiempo y de los gritos de los pájaros carroñeros en busca de presas. Dijo: "Tuve esta abrumadora sensación de por qué me habían traído a esta mezcla, nuestra tarea aquí es llevar la conciencia al ser bruto, hacer que la naturaleza sea consciente de alguna manera". Por supuesto, la pregunta es, ¿qué hacemos con esa conciencia? Esa es otra historia completamente diferente. Pero es al menos interesante pensar que el animal humano ha evolucionado, su cerebro se ha desarrollado durante muchos milenios y ahora es capaz de una enorme belleza y compasión, por un lado, y de una violencia y opresión aterradoras, por el otro."

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"La bellota debe ser el roble. Esa es su naturaleza. Todos tenemos una naturaleza que busca desplegarse y expresarse, exfoliarse en el mundo. No muchas bellotas se convierten en...
Donde las definiciones sociales prevalecen sobre su proceso natural de desarrollo. Realmente no pueden expresarse porque su clima social no se lo permite. La historia ha estado llena de eso tal como la conocemos. Por eso la miseria humana siempre ha estado apareciendo. Porque, nuevamente, hay cierta imposición del mundo sobre el proceso natural de desarrollo de esa bellota que lucha por convertirse en roble. La respuesta a la pregunta es sí, todos estamos destinados a servir, no la conciencia del ego per se, porque mi desarrollo puede ponerme en peligro. Eso es algo que todo el mundo tiene que experimentar como un conflicto interno. Hablando como introvertido, por ejemplo, he vivido una vida extrovertida. Pero es porque he estado al servicio de una determinada misión, que ha sido la educación pública durante varias décadas. La educación pública es algo que tiene suficiente valor para mí como para estar dispuesto a superar mi timidez y aprensiones inherentes en torno a la divulgación pública. Mis maestros de escuela cuando era niño eran mis héroes, porque esas queridas señoras más una bibliotecaria de barrio me ofrecieron un mundo más grande. Me mostraron algo que vale la pena afirmar, y lo recuerdo como el verdadero lugar de mi crianza, donde tuve la sensación de que hay un gran mundo ahí fuera, tal vez puedas salir y explorar partes de él. Desde entonces me he identificado con la educación."

James Hollis





"Lo que Jung entiende por inconsciente colectivo es lo que es común a nuestra especie. Simplemente me referí a nosotros como humanos, una rama de un árbol evolutivo que desarrolló una mayor cognición para bien y para mal en el mundo. Mire nuestra crisis ecológica en la que nos encontramos. Fue creado por nosotros, no por animales, no por plantas, es creado por nosotros. Somos un animal problemático aquí. El inconsciente colectivo representa la fábrica central de imágenes, por así decirlo. Podrías soñar esta noche un sueñoeso es prácticamente idéntico a un sueño soñado hace milenios. ¿Por qué? Porque nuestra facultad de crear símbolos es más o menos la misma. Sabemos que hay ciertas tendencias en el comportamiento humano que son predecibles. Si miras las casas de gobierno o las casas de religión, encontrarás enormes conflictos y desorden en nuestro tiempo. Esto se debe a que estos conflictos se están desarrollando, se cometen los mismos viejos errores, las mismas viejas tentaciones están presentes. Lo que se hace en un milenio se repite en otro o se transmite de generación en generación. Lo sabemos, la evidencia es obvia, sólo hay que ser estudioso de eso. Cuando empiezas a darte cuenta de eso, te das cuenta de que la humanidad en los últimos miles de años no ha cambiado mucho. Nuestra tecnología ha cambiado, nuestras estructuras sociales han cambiado, nuestros valores sociales, nuestras historias han cambiado. La psique humana es más o menos la misma. Hay algo en nosotros que podemos encontrar en nuestro hermano Edipo o en nuestra hermana Antígona. Hay algo que estos antiguos dramaturgos pudieron identificar como el núcleo de la tentación humana, por un lado, y de la capacidad humana de transformación, por otro, y que también es común a nosotros. Cuando estudiamos estas cosas, no estamos estudiando lo antiguo, porque estamos estudiando lo contemporáneo. Deidad contemporánea de la formación creadora de símbolos que cada uno de nosotros tiene en mente. Un arquetipo es el proceso de estructuración de estas imágenes. Una de las expresiones arquetípicas más comunes es la idea del viaje. Es algo a lo que aludo con frecuencia. Siempre estamos en movimiento hacia algo. Cada mañana nos levantamos enfrentando una lucha arquetípica. Como he notado en varios libros, a los pies de la cama hay dos duendes. Uno se llama Miedo. El otro se llama Letargo. Ambos quieren comerte por hoy. El miedo dice: “Es demasiado para ti. Es demasiado desafiante, no puedes manejarlo”. El letargo dice: "Relájate, mañana será otro día, tómate un poco de chocolate". Y el llamado es a callarte y aparecer, dar un paso hacia eso, valerte por ti mismo y vivir tu vida lo más plenamente que puedas ese día y todos los días. Esa lucha arquetípica se da entre progresión y regresión. Como escribió Jung en 1912, el espíritu del mal, que es un lenguaje fuerte, el espíritu del mal es la negación de la fuerza vital por el miedo. Sólo la audacia puede librarnos del miedo. Si no se corre el riesgo, se viola el sentido de la vida. Eso está bastante claro. A nadie le gusta el miedo, sino todo lo contrario. Pero el miedo gobierna tu vida porque toma decisiones por ti. ¿Dónde interviene y lucha la buena batalla contra ello? Quizás nunca nos deshagamos de esos miedos. Pero todavía tenemos que vivir nuestra vida a pesar de ello. Una cosa es tener miedos, y otra cosa es tener una vida llena de miedos, y es muy diferente. Esa es la lucha por la que todos pasamos. Ésa es la lucha eterna que todos los seres humanos han tenido que afrontar. Hay un pasaje maravilloso en los relatos de Marco Aurelio. Está en la frontera de la lucha contra las fuerzas teutónicas.Se dice a sí mismo: "Quería quedarme en la cama esta mañana, hace frío afuera". Luego dice: “¿Pero qué has sido llamado a hacer con tu vida?” No es para venir aquí y taparte la cabeza con la manta. Es levantarse y enfrentar lo que es una amenaza tan grande para su vida y su bienestar. Son imágenes y tendencias que provienen del inconsciente colectivo, son atemporales. Se pueden encontrar mientras estudiamos las escrituras, las obras de arte y las tradiciones religiosas del mundo antiguo."

James Hollis



"Mis libros han surgido de mi trabajo con clientes. A veces, incluso mis propios sueños hablan de esos individuos y tengo que preguntarme: “¿Qué estaba pasando allí? ¿Cómo entiendo eso? ¿Cómo abordo eso?

Por ejemplo, cuando escribí mi primer libro, The Middle Passage , acababa de regresar de una formación en Suiza y estaba viendo personas con diferentes problemas e historias. Pero una cosa que todos tenían en común era que su comprensión de sí mismos y del mundo se había desarrollado. Ya no era eficaz, si es que alguna vez lo fue. Su hoja de ruta ya no era aplicable al territorio en el que se encontraban, y pensé, eso es lo que sucede durante un trayecto: algo tiene que morir y algo más quiere emerger. Estás atrapado en ese difícil punto intermedio."

James Hollis



"Por un lado, nunca integraremos la sombra. Es tan grande como el universo, como tampoco integraríamos el inconsciente. A menudo defino, en primer lugar, al ego como una fina oblea que flota en un océano iridiscente. Ese océano es el inconsciente , fácilmente puede abrumar la conciencia y poseerla, nos pasa todo el tiempo. Hay grupos de energía en el inconsciente que, cuando se activan, surgen y se apoderan de la conciencia del ego. Eso es lo que pasa cuando somos víctimas de un complejo, todos tenemos complejos. La palabra "complejo" proviene del alemán original y significa "estructura", como complejo aeroportuario o complejo de apartamentos. Si tú, cuando eres un bebé, te acercas y tocas ese hierro candente, ahora tienes una historia, ahora tienes una experiencia. ¿Cómo se reflejará eso en tu comprensión general de ti mismo y del mundo? ¿Eso te hace tener miedo de cada objeto brillante? ¿Te protege? ¿Te limita? ¿Cómo se internaliza eso? Parece un ejemplo trivial, pero tomas esos ejemplos multiplicados por miles y te das cuenta de que la vida interpsíquica está plagada de cúmulos de energía que tenemos alrededor de todo: andar en bicicleta, aprender a usar patines, etc., sin mencionar nuestras relaciones con otras personas, que están llenas de importancia por razones obvias. Nuevamente, debajo de todo esto está esta alma naciente que desea expresión y aceptación en el mundo y puede que tenga que luchar contra muchos obstáculos para llegar allí.

Significa una conversación continua por el resto de la vida. Una vez más, no asociemos la sombra con el mal. Nuestro mayor problema oculto, como usted señaló, es que vivimos vidas pequeñas. Esa es una declaración significativa. Nuestra comprensible necesidad de seguridad, saciedad y seguridad puede prevalecer. Podemos confabularnos para cerrar nuestros propios talentos, llamamientos o capacidades. Como dice el viejo refrán, no mucha gente en su lecho de muerte mira hacia atrás y dice: "Ojalá hubiera pasado más tiempo en la oficina" o algo así. Suele ser “Ojalá hubiera emprendido ese viaje que siempre quise hacer”, o “Ojalá hubiera empezado a pintar cuando realmente quería”, “Ojalá hubiera pasado más tiempo con mis hijos”. Cualquiera que sea la forma que adopte, existe un problema oculto para ese individuo. ¿Por qué estás bloqueado para hacer eso? ¿Qué te impide ver eso en primer lugar? Ésas son cuestiones en la sombra. Vivir una pequeña vida adaptativa y protegida es comprensible. Hay partes de nosotros que se sienten atraídas por eso. Pero, de nuevo, ¿qué pasaría si tu vida interior te hiciera emprender un viaje de un tipo u otro? Emily Dickinson viajó mucho, pero nunca salió de casa, por así decirlo, en un sentido físico. Pero ciertamente viajó psicoespiritualmente. Lo hizo a cambio de un precio por parte de su propia familia y su comunidad. Si no lo hubiera hecho, nunca hubiéramos oído hablar de ella. No significa que estemos aquí para alcanzar la fama ni nada por el estilo, eso puede ser muy superficial y difícil de alcanzar. Más bien, ¿qué pasa si la voz que buscas expresar o encarnar nunca se escucha en este mundo? Entre los escritores, por ejemplo, existe el cliché de “tienes que encontrar tu propia voz”. ¿Qué significa eso? Los escritores jóvenes empiezan intentando emular a Hemingway, o Fitzgerald, o uno de estos escritores actuales. Es plano e imitativo, porque no es su voz. ¿Cómo encuentras tu voz? Tienes que arriesgarte de alguna manera. Cuando haces eso, entras en tu mayor capacidad. La individuación consiste en encontrar tu voz en la vida y hablar lo que sea necesario."

James Hollis



"Si pudieras imaginar a una persona lo suficientemente valiente como para asumir su propia sombra, esa persona ahora carga con un nuevo problema."

James Hollis




"Tendemos a reprimir o imponer a los demás lo que no es aceptable y lo que no nos está permitido. Nuevamente sufrimos una enfermedad interior porque nos estamos separando de algunas de nuestras energías más vitales. La persona es una palabra griega que después de todo significa “máscara”, originalmente vino de “sonar”, “sonar”, cuál es el sonido que sale, quién eres realmente es máscara. Lo opuesto a la máscara en cierto sentido es mi humanidad plena, que incluye elementos que yo o mi sociedad rechazamos o controlamos, por lo tanto se convierte en material de sombra. La conciencia del ego se mueve entre ellos de vez en cuando. Nuevamente, si servimos sólo al mundo de las personas, seremos criaturas superficiales de adaptación. Gran parte de la vida está en piloto automático, vivimos quizás durante décadas en respuesta a estímulos hasta que a una persona le llega algo que dice: "No se puede permitir que esto continúe, tengo que cambiar algo, esto es lo que la vida me llama a hacer". .” Podríamos decir, y ésta es una distinción muy burda, pero la primera mitad de la vida se trata de construir ese mundo del ego. Dejo a mis padres, salgo al mundo, le digo a un empleador: "Contrátame, puedes confiar en mí para presentarme y hacer el trabajo por el que me estás pagando". Formamos una relación, "Confía en mí en esta relación, porque te encontraré a mitad de camino", y así sucesivamente. Luego, habiendo hecho todo eso, alrededor de 35-40-45-50, uno comienza a decir: “¿Adónde vamos a partir de ahora? ¿De qué se trata esto realmente? ¿Cuál es mi viaje, ya que de alguna manera ya he logrado estas metas en la vida? ¿Adónde podrías ir desde aquí? Si es así, hay que recordar que en 1900, la duración media de la vida en América del Norte, EE. UU. y Canadá era de 47 años. Prácticamente hemos duplicado esa cifra en nuestro tiempo. Se podría decir, habiendo cumplido las funciones biológicas de reproducir la especie y convertirnos en criaturas socialmente adaptables, ¿por qué seguimos aquí? La naturaleza ya no nos necesita. ¿Cómo debemos vivir nuestra vida? Eso ya está planteando interrogantes de la vida, del espíritu, es decir: “¿Qué valores me doy? ¿Cuál es mi vocación aquí? ¿Quién soy yo aparte de mis logros en la vida, mi currículum, mi casa en el suburbio?”. Todas estas cosas comenzaron a surgir para una persona y el significado de su vida, es el grado en que está dispuesta a abordar esas preguntas de frente en la segunda mitad de la vida. Así es como recuperas tu vida. Sin embargo, quiero enfatizar esto muchas veces, el precio de no ir es la muerte del espíritu, el precio de salir de lo convencional es vivir alguna forma de exilio. Uno tiene que estar dispuesto a aceptar su exilio de los estándares convencionales para poder emprender su viaje. No me refiero a esto en un sentido adolescente de hacer alarde de las autoridades ni nada por el estilo. Eso es muy infantil. Como dije, si no sirves a lo que quiere expresarse a través de ti, se produce una terrible deformación del alma. El alma responde sintomáticamente y tendrá lo que Kierkegaard llamó la enfermedad de muerte, que es una terrible depresión que lleva a la desesperación."

James Hollis









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